¿Sabes qué es y para qué sirve la Sonda Lambda? En Escape y Bujía queremos presentarte información sobre una pieza que permite que los sistemas modernos de los coches trabajen con normalidad. En la actualidad, la sofisticación de los sistemas eléctricos hacen que diversos elementos del coche puedan aprovecharse en su máximo potencial.
Contenidos
Sonda Lambda: Qué es y por qué es tan importante
Antes de explicarte los diferentes tipos de Sonda Lambda y sus averías más comunes, primero debes saber qué es y cuál es su importancia y funcionamiento en los coches. Básicamente, se trata de un instrumento que permite medir y gestionar la concentración de oxígeno de los motores de gasolina, gas y diésel.
Entre sus funciones se encuentra la medición del contenido de oxígeno residual de los gases de escape, para posteriormente trasmitir una señal de voltaje eléctrico al sistema de gestión del motor. Esto permite que la unidad de control sea capaz de señalar si la mezcla es demasiado magra o rica.
Por su parte, la unidad de control tiene la capacidad de reducir la cantidad de combustible en caso de ser demasiado rica o aumentarla en caso de ser magra. La Sonda Lambda está ubicada en el conducto de escape del coche, donde puede medir la cantidad de oxígeno que producen los gases expulsados por el tubo de escape.
Tanto el aire como el combustible tienen que estar ubicados con lo establecido por la proporción estequiometria para ser catalogado como el resultado de una combustión exitosa y óptima.
Algo a tener en cuenta es que la Sonda Lambda tiene elementos con una resistencia bastante considerable; de hecho, esto es los que permite que pueda realizar una mediación precisa y adecuada pues debe alcanzar los 340 grados centígrados de temperatura.
Debes saber que también se puede tener un segundo sensor de oxigeno cuyo principal funcionamiento es diagnosticar y detectar si el sensor de control está trabajando de manera correcta.
¿Qué tipos de Sonda Lambda existen?
En la actualidad existen dos tipos de Sonda Lambda, y cada uno tiene una función específica. El primero es el Sensor Binario o Banda Estrecha, el cual tiene la capacidad que realizar un cambio en el voltaje eléctrico según la información obtenida por el nivel de oxigeno expulsado del tubo de escape.
También es capaz de realizar una comparación entre el contenido de oxígeno residual del escape y el nivel de oxígeno del aire ambiente. Todas estas funciones logran que el Sensor Binario sea capaz de identificar si hay una mezcla rica, que es cuando hay poco aire, o magra, caracterizada por tener exceso de aire.
No obstante, cabe aclarar que el Sensor Binario, a pesar de ser eficiente, es un poco más económico y algunos aseguran que su precisión no es tan puntual como se podría creer. A pesar de esto, es una excelente opción y hay quienes recomiendan su uso.
El Sensor Lineal o Banda Ancha, por su parte, es considerado por muchos como el más eficiente y preciso del mercado pues mide con una extrema exactitud la proporción del aire y el combustible, determinando eficazmente si es rica o magra.
Esto se debe a que su rango se medición en más grande que el Binario. Es una excelente opción para motores de gasolina o diésel. Cabe mencionar que el Sensor Banda Ancha al ser más preciso es más costoso que el anterior nombrado.
Sonda Lambda: Averías comunes y síntomas
Algo que debes entender es que prácticamente todas las piezas, sistemas y elementos que conforman un coche pueden llegar a sufrir fallos debido al mal uso, mala calidad, poco mantenimiento, etc. Es por esta razón que es importante prestar atención a los parámetros anormales, sonidos extraños, color del humo y otro tipo de señales que indican que algo no anda bien con el vehículo.
En el caso de la Sonda Lambda, los errores más comunes son mezclas excesivamente ricas, es decir, que tienen poco oxigeno; o mezclas demasiado magras, que posee demasiado oxígeno. Esto es importante, pues si la sonda no funciona de manera correcta, la Unidad de control del motor (ECM) no podrá ajustar correctamente la cantidad de combustible que entra al motor.
Si la mezcla de oxígeno y combustible no es el adecuado, ya sea por ser rico o magro, aumentará los contaminantes expulsados por el tubo de escape y dañar el convertidor catalítico. Todo esto se traduce en gastos extras.
Síntomas de fallos en la Sonda Lambda
Hay maneras de saber si la Sonda Lambda está fallando. Una de ellos es si la luz naranja del “CheckEngine” permanece encendida. Este es uno de los primeros síntomas, aunque no es el único; cabe señalar que también puede encenderse si la tapa de gasolina está suelta.
Lo que determinará el fallo en la Sonda Lambda es si además de la luz encendida, tu motor produce un sonido áspero o irregular.
Asimismo, debes estar pendiente del rendimiento del combustible. Cuando hay fallos en el sensor y no se realiza una mezcla correcta, el motor tiende a ser poco eficiente; es decir, puede llegar a consumir rápidamente el combustible.
Por otro lado, los errores en la prueba de emisión suelen producirse por una Sonda Lambda defectuosa; esto, además de producir diversas consecuencias negativas en el sistema de tu coche, también hace que tu vehículo despida un desagradable olor a huevos podridos.
Un síntoma temprano de una avería en la Sonda Lambda es si tu vehículo intenta avanzar cuando estás parado o tener sacudidas inusuales al acelerar. También habrá un fallo en el convertidor catalítico, lo que significa que, dependiendo de la gravedad, la potencia del motor se ve directamente afectada.
¿Qué te ha parecido este artículo? Respóndenos en la sección de comentarios y no olvides compartirlo en tus redes sociales.
